Un plano de la tierra vista desde el espacio nos lleva a iniciar esta historia. En un hangar de Aeroplanos Ferris, uno de nuestros personajes principales repara uno de los cazas F91. Hasta que una luz verde lo atrapa por completo, lo eleva y comienza a flotar suavemente. Alguien lo llama por su nombre. Hal Jordan ha sido elegido. El Sector 2814 lo necesita, su protector Abin Sur ha caído. El herido quiere que acuda a su llamada. El día más brillante precede a la noche más oscura y se necesita un héroe. El mayor poder del universo está a punto de cambiar de manos. El piloto de aviones tendrá que decidir si se une al cuerpo policial intergaláctico más grande de todos los tiempos. La pregunta es: ¿Aceptará esa enorme responsabilidad?

En 2004, DC Comics ante la caída de las ventas de la serie Green Lantern decidió realizar un relanzamiento de la línea. Eligiendo adecuadamente a los artistas integrantes que llevarían a cabo la labor. Primero confió en el talento de un autor que se iniciaba con cierto prestigio, y que había demostrado su valía en la serie de The Flash: Geoff Johns («Batman: Three Jokers«, «El Reloj del Juicio Final» o «Geiger«). Para insuflar nueva vida a la colección, lo que hizo este guionista fue recuperar a Hal Jordan como protagonista. Podemos recordar que Jordan pasó a convertirse en Parallax, para poco tiempo después ocupar el puesto de El Espectro. Todo cambio en la serie «Rebirth«, y posteriormente en los números de ‘Green Lantern: Secret Files and Origins’. Donde se explica el origen clásico del personaje y los trece primeros números con nuevas aventuras. Johns consigue atraer a los lectores por su forma de narrar. La resurrección de Hal Jordan la enfoca como si nada fuera sencillo. Los pecados del pasado no se olvidan, pero se tiene que seguir adelante. El protagonista debe volver a tener la confianza de amigos y aliados como en el caso de Kilowog, Green Arrow o Batman, pero todas las miradas las sitúa este guionista en Jordan. Utiliza también viejos villanos, como los Manhunters, King Shark, Mano Negra o Hector Hammond entre otros. Utiliza a cada uno de ellos para ir conformando y convirtiendo la trama en un problema tras de otro, donde cada uno de ellos agranda al anterior.
En el aspecto artístico tenemos a varios autores, como son Ethan Van Sciver, Carlos Pacheco, Simone Bianchi o Darwin Cooke. Se puede considerar uno de los puntos más fuertes de este reinicio. Ya que con este relanzamiento se apostó por un impacto visual muy fuerte para el lector. El estilo de Ethan Van Sciver para ciertos números están bien asignado por su tipo de dibujo, atrapando al lector con su velocidad y agresividad en las viñetas.

Carlos Pacheco («Arrowsmith«, «Superman.La Caida de Camelot» o «Siempre Vengadores«), es, bajo mi opinión, el autor al que tendrían que haberlo dejado para dibujar todas las historias que tenemos entre manos. Su estilo casa a la perfección con el personaje y cada número que dibujo es una maravilla. Además de ser entintado por su segundo espada: Jesús Merino.
Los otros dos dibujantes elegidos, Darwin Cooke y Simone Bianchi, se puede salir un poco más de la estética más o menos estable Van Sciver y Pacheco. Cooke nos puede generar un ambiente más nostálgico y con un toque más clásico, mientras que Bianchi es más pictórico y nos saca un poquito de toda la trama que vamos leyendo.
No obstante, en términos generales la serie funciona a nivel global, aunque se eche de menos mayor un nexo gráfico común. Pero al fin y al cabo se trata de una cabecera mainstream, no un cómic de autor y el resultado es la suma de todas las partes.
La primera edición americana salió a la venta por parte de DC Comics en Julio de 2005 y se llegó hasta el número nueve en abril de 2006. La primera vez que llegó a España vino de la mano de Planeta de Agostini, en una serie de especiales que abarcaron esos números. A día de hoy esta serie se puede encontrar en recopilatorios realizados por ECC Ediciones. A nadie se le escapa que Geoff Johns, Carlos Pacheco o Jesús Merino llevaban el tebeo de superhéroes en la sangre. Que lo han mamado, que lo han querido y lo han llorado. Por eso no es de extrañar que cuando se unieron, construyeran uno de los renacimientos más significativos del medio superheróico. Si Green Lantern significa algo a día de hoy para muchos aficionados es por el excelente y extenso trabajo que hizo Geoff Johns con él. Y en los primeros pasos, además de Ethan Van Sciver, los dados junto a Pacheco y Merino fueron capitales, por el brillo gráfico que aportaron.