Antes de que comience la celebración del veinticinco aniversario de “El Baile del Vampiro” con la próxima aparición de la edición especial que conmemora la efeméride, Sergio Bleda tuvo a bien atendernos para ahondar un poco más en esta saga que nos cautivó desde el ya lejano siglo XX. Una saga que lejos de envejecer se mantiene inmortal, como sus protagonistas “no muertos”. Una saga que sigue contando con la complicidad del público y se va engrandeciendo cada año con nuevos títulos, como “Redes” o “Ruina Motium”. Ahora toca celebrar el cumpleaños de plata de la serie original y Sergio está en ello, sumergido en una exitosa campaña de crowfunding de la que nacerá la edición especial de la serie con la que empezó todo. De ello charlamos con él.
Veinticinco años se dicen pronto, pero es un largo tiempo. ¿Qué supone para ti como autor que una de tus primeras obras se mantenga en la memoria del aficionado?
Es un honor y un placer, claro. También debo decir que en la Línea Laberinto había muy buenos títulos, como «Iberia Inc.», «Mentat» o «Mal Chance» que, si sus autores trataran de reflotar, serían muy bien acogidos por los lectores españoles. Así que el mérito no es tanto de la calidad de la serie como de mi propio empecinamiento personal en seguir estirando el chicle.
En cualquier caso, es una obra a la que le tengo un cariño tremendo y todavía me queda mucho que mostrar de estos personajes. Es maravilloso contar con la complicidad de los aficionados que han hecho posible que la serie se mantenga viva.
Esta obra es la que te dio a conocer a un mayor público, logrando una nominación como autor novel. ¿Supuso “El Baile del Vampiro” un paso definitivo en tu carrera?
Sin duda. Hasta entonces sólo había publicado a nivel nacional en la revista Kiss Comix, y aunque es algo de lo que estoy igualmente orgulloso y que siempre reivindico, digamos que estaba “mal visto”. Como era un cómic pornográfico, a pesar de que lo leía mucha gente, la crítica y el fandom en general hacían como si no existiera. También fue mi primera historia larga publicada por una editorial grande como Planeta, con todo lo que eso supone.
Incluso llegó a publicarse en Estados Unidos con Dark Horse, algo que en esa época no era tan habitual ¿Cómo se llevó a cabo?
Fue a través de SAF (Strip Art Features), la agencia de Ervin Rustemagic que también representa a otros autores como Hermann, Risso o Alfonso Font. Para SAF dibujé varios álbumes (“Duérmete niña”, “Bloody Winter” y la trilogía de “La conjura de cada miércoles”) y en un momento dado Ervin me propuso representar también las ventas al extranjero de “El baile del vampiro”. “La conjura de cada miércoles” también fue publicada por Dark Horse a través de este agente.
Volviendo al tebeo en sí, y a la exitosa campaña de crowfunding que estas llevando a cabo para celebrar estos veinticinco años de “El Baile…”, no podemos más que felicitarte porque en apenas 24 horas ya has superado el objetivo de financiación (en el momento que discurre esta charla ya ha sobrepasado los 6.000 €) Dicho lo cual, ¿que nos podemos encontrar en este lanzamiento?
Además de un nuevo escaneado del cómic directamente de las páginas originales y una nueva rotulación podremos encontrar un extenso artículo con datos y curiosidades sobre la creación del cómic. Como vamos desbloqueando recompensas a estas alturas todos los mecenas se encontrarán además, e independientemente de la recompensa que hayan escogido, con un recortable de Inés, marcapáginas, chapas y alguna cosita más en la que estamos trabajando. A parte de la posibilidad de adquirir un original o una commission a un precio especial. También hemos impreso facsímiles de la primera página doble de la serie y otro volumen de 88 páginas con el guion original del primer número, bocetos, lápices, fotografías de referencia… hay de todo.
Un detalle que me parece destacable es que has decidido que los extras formen un volumen aparte del cómic en sí. Hecho pensado para la gente que te sigue desde los comienzos, ¿correcto?
Exacto. Eso es porque además de autor soy también un lector y un aficionado, y me revienta especialmente cuando tratan de venderme el mismo producto una y otra vez cambiando cuatro detalles o añadiendo una paginita más al final de la historia. Es una manera de aprovecharse de los coleccionistas. Así que decidí que, vale, iba a incluir un montón de material extra, pero si ya tienes la serie original y no quieres volver a gastarte tu dinero en ella pero te interesan los extras puedes comprar por separado el cuadernillo de 88 páginas.
Te has hecho cargo directamente tú de la edición de este aniversario. Un hecho que no es novedoso puesto que las dos secuelas (“Redes” y «Ruina Motium”) que lanzaste estos últimos años optaste por la autogestión. ¿Te sientes cómodo con ella?
La autogestión supone mucho trabajo pero también supone mucho más beneficio. Y no me refiero únicamente al económico, que también. Tienes un contacto más directo con tus lectores y esto es algo gratificante. Se crea un vínculo entre autor y lector que difícilmente se crea con el sistema de edición estándar. Me siento tremendamente cómodo porque disfruto de una libertad creativa que jamás me daría un editor y, también, todo se hace a mi gusto. Además mis ideales políticos están más cerca del anarquismo que de cualquier otra cosa, y el apoyo mutuo y la autogestión son dos grandes pilares de esta filosofía. Es verdad que pagas muchas novatadas y cometes muchos fallos pero, poco a poco, vas salvando esos obstáculos. Es una lástima que la autoedición siga estando mal vista por una parte de la crítica, que directamente nos ningunea porque no trabajamos con distribuidora, o de ciertas asociaciones presuntamente creadas para representar nuestros intereses que nos esconde debajo de la alfombra y sólo se arrima a los autores “de éxito” o al político de turno para salir en la foto. En el mundo del “tanto vendes: tanto vales” que los creadores autogestionemos nuestra carrera sin pasar por los cauces habituales es algo que parece hacer sentir incómodo a más de uno.
¿Crees que quizá ese es el camino (“la autogestión”) para el autor español dada la coyuntura de nuestro mercado nacional?
Rotundamente sí, porque los editores no parecen interesados en cambiar el sistema actual, en el que compran nada menos que el 90% de lo que editan en el extranjero. Y, de hecho, no me extrañaría que ese porcentaje, lejos de reducirse, subiera todavía más, dado el nuevo boom del cómic japonés entre los lectores más jóvenes. Así que o te autoeditas, o trabajas para editoriales extranjeras o sigues compaginándolo con otros trabajos y teniendo el cómic casi como un hobby. Si tienes suerte igual ganas el Premio Nacional y ese año te sale rentable la cosa. ¡Qué pena que el Premio Nacional sólo se de una vez al año y no haya para todos!
No todo va a ser vampiros en esta charla. Así que te preguntaremos sobre los proyectos que tienes sobre la mesa para que nos cuentes algo al respecto.
En marzo de 2023 comienzo un cómic de unas 90 páginas que me tendrá ocupado hasta finales de 2024. Me encargaré de dibujar un guión escrito por mi compañero Francisco Ruizge (con el que ya he colaborado en varias ocasiones, como en “Ruina Motium”) y que me hace especial ilusión. Me muerdo la lengua porque no quiero destripar el argumento pero puedo decir que el título será “O2” y tiene una parte de fantasía pero, sobre todo, una gran carga de temática social, Y hasta ahí puedo leer….
Además de eso sigo haciendo ilustración erótica y trabajando en mi proyecto sobre Goya. Este último tenía esperanzas de ponerme con él a finales de 2022, pero quien parecía que me iba a dar todo su apoyo a la hora de buscar financiación digamos que pareció mostrarse menos entusiasmado en el último momento , así que me dejó un poco desencantado. No se cómo voy a levantar ese proyecto en el futuro porque al ser a color tendría que reunir mucho dinero (no sólo para editarlo, también para pagar mis facturas durante los 12 o 14 meses que tardaría en dibujarlo y colorearlo) y no estoy seguro de poder lograr toda esa financiación únicamente con el crowdfunding. No sé cómo, pero acabaré por encontrar la manera.
Ahora mismo estoy coordinando, junto con mi pareja, un experimento editorial colectivo para el que contamos con la colaboración de primeras figuras de nuestra industria que ya están preparando material. Va a ser, o al menos así lo espero, muy sonado. Pero tampoco puedo adelantar nada. En un par de meses lo sabrás. Espero contar con vuestra ayuda entonces para darlo a conocer.
Por supuesto. Ya sabes que lo que cuente con tu arte por aquí siempre es bien recibido. Por último y tras agradecer tu tiempo para que podamos entrevistarte en la antesala de la celebración de los veinticinco años de Jakob, Inés, Ana y el Vampiro Blanco, no podemos dejar pasar la ocasión para saber si tienes en mente algún nuevo relato que continúe este “Baile”.
Lo cierto que que sí. Y, de hecho, si todo sale según lo previsto, en este experimento editorial que te comentaba aparecerá una nueva aventura de uno de estos personajes. A parte de eso, tengo muchas ideas por desarrollar que espero que no se queden en el tintero. De momento, el año que viene, quiero reeditar “Inés 1994” en el mismo formato que “Redes” y “Ruina Montium”, y a partir de ahí continuar la historia, con nuevo material, inmediatamente después de lo sucedido con Inés en las torres de la Sagrada Familia en la serie original. Mientras los lectores me sigan prestando su apoyo tengo cuerda, y colmillos, para rato.
Y con la reedición de “Inés 1994”, O2, Goya y un futuro proyecto independiente en el horizonte despedimos a Sergio, al que dejamos ultimando detalles del 25 aniversario de “El Baile del Vampiro” que de forma inminente verá la luz en una nueva edición. Un “Baile…” que sigue sonando con la misma fuerza que el primer día y al que deseamos incorpore muchas piezas al repetorio.