Los años pasaron tras el soplo de aire fresco que supuso el primer volumen de Arrowsmith. Años en los que se aplicaba la máxima de John Lennon: “La vida es eso que te pasa mientras estamos haciendo planes”. Así la última etapa en DC comics se centró en dar prioridad a urgencias editoriales, como el Superman con Kurt Busiek y el refuerzo que supuso su lápiz a esa “Crisis Final” cuyos plazos de entrega eran imposibles de llegar. Tras eso, la vuelta a Marvel, aún con la cláusula que permitía al gaditano hacerse cargo de la continuación de su creación con Busiek, le mantuvo ocupado. En 2019 por fin el proyecto se retomó. Así pudimos comprobarlo en la Video Game Comic de Alicante cuando el propio Carlos comentaba su continuación con los aficionados. Pandemia por medio, “Behind Enemy Lines”por fin pudo ver la luz de la mano de Image Comics, con fecha de portada enero 2022.

Por fin Kurt Busiek y Carlos Pacheco continuaban las aventuras de Fletcher Arrowsmith, esta vez acompañados por las tintas de Rafael Fonteriz y el color de José Villarrubia. Había llegado el momento de ahondar más en ese fantástico mundo de magia que habían creado casi dos décadas atrás y volver a esa primera guerra mundial donde lo tecnológico es sustituido por lo mágico.

A lo largo de seis entregas, en las que se contaron con artistas de la talla de Howard Chaykin, Gabriel Hernández Walta, Dan Panosian, Jerry Ordway, Dave Johnson, J.G. Jones, Karl Kerschl, Paul Renaud, Greg Smallwood, Ben Dewey, Mark Schultz, Mahmud Asrar, Carmen Carnero, Gabriel Rodriguez, Shawn McManus, Ramón Pérez, Nekro y Juanjo Guarnido, la serie fue superando las altas expectativas previas.

Busiek y Pacheco demostraron que tenían más que contar sobre este concepto. Lo hicieron con la maestría que les otorgaba los años de experiencia desde la primera obra, buceando más en ese universo tan rico que crearon. Así Fletcher va a ser asignado, por sus conocimientos de la lengua de los trolls, a una misión de carácter secreto. Una misión que le va a llevar a las líneas enemigas.

Busiek (“Marvels”, “Astro City” o “Siempre Vengadores”) es un hábil escritor que sabe dar argumentos complejos y ricos de forma fluida en sus guiones. Aquí lo vuelve a demostrar en un relato que discurre de forma aparentemente sencilla pero que va introduciendo elementos que van enriqueciendo tanto la historia como el universo al que pertenece. Así ahondaremos en cuestiones mitológicas que ahondan en la historia de ese mágico mundo y, a la vez, descubriremos “el as en la manga” que puede ser definitivo para decantar la balanza de la guerra. Evidentemente la analogía entre magia y tecnología sigue presente, al igual que el tono bélico propio de esta serie. Una serie que me atrevería a decir que funcionaria igual sin los elementos mágicos que la componen. Si bien estos elementos la singularizan más haciendola, al igual que en “Tan guapos de Uniforme”, algo único. Quizá el primer arco sea la obra cumbre de las carreras de Busiek, Pacheco y Merino, por todo lo que supone la creatividad mostrada en sus páginas. En “Behind Enemy Lines” Pacheco y Merino, junto a Fonteriz y Villarrubia, están sobradamente a la altura precedente, dándonos en estas páginas una obra notablemente digna de sucederla.

Da la sensación, al volver a releer estos tebeos para la elaboración de este texto, que los implicados disfrutaron con estas páginas. Aquí esta el Pacheco con gusto y habilidad por el detalle, el narrador que te mete en el relato mediante encuadres y composiciones certeras. Que enriquece la viñeta menos esperada con alguna cosita que da mayor empaque al resultado final. A su lado, Fonteriz revelándose como el mejor aliado para esos lápices, ya más estilizados, de su última etapa artística, siempre al servicio de lo dibujado. José Villarrubia demuestra su categoría con unos colores acertados, reforzando las “emociones” y “sensaciones” que han de transmitir esas viñetas. Un equipo, en definitiva, que parece se entiende a la perfección y, fruto de eso, obtienen un resultado excelente.

Un resultado que, paradójicamente, y como sucedía con su predecesora, respira Bande Dessinée por los cuatro costados, por mucho que se haya realizado en una editorial norteamericana. Tanto por el tono que imprime Busiek al relato por el trazo de Pacheco, que aquí vierte esos descubrimientos de niño por el Blueberry del maestro Jean Giraud, antes de ser Moebius, y los cómics franco belgas. Todo ese bagaje que tenía Pacheco lo traslada a su lápiz, asimilándolo a su estilo, dando unas viñetas en los que la querencia por el detallismo y la vitalidad de trazo son marcas de la casa.

Acabado este arco el pasado junio del 2022, en septiembre Image lo lanzó en formato TPB. En el aire queda “Beyond Borders”, el arco que continuará lo iniciado aquí. Ya se escucha un candidato ideal para coger el testigo de Carlos en la continuación, pues es conocido el deseo del dibujante de San Roque de que la saga continuara después de él. De momento nos queda lo mostrado en “Behind Enemy Lines”, un tebeo que verá este año la luz en castellano de la mano de Dolmen Editorial, que reeditará previamente “Tan Guapos de Uniforme” en el formato y contenidos de la última reedición de Image, quizá la más completa que ha tenido esta obra.

Más allá del irreparable hueco que deja en el mundo internacional del cómic el fallecimiento de Carlos Pacheco, su última obra junto a Busiek, supone una despedida por la puerta grande. Tanto en el guion junto a Busiek, como al arte junto a Fonteriz y el color de Villarrubia, la continuación de las vivencias de Fletcher Arrowsmith no solo está a la altura de la saga original, sino que la amplia y complementa, dando mayor empaque al conjunto. La magia perdura. Basta para ello leer estos tebeos.