“Cachislamar”. Esa fue la expresión que sonó en el interior de muchos de los aficionados que crecimos con Super López cuando nos enteramos que Jan ponía fin el año pasado a las andanzas de su entrañable personaje. Atrás quedaban cinco décadas de 87 tebeos en los que Juan López vivió numerosas aventuras y la eterna gratitud de varias generaciones lectoras que crecimos con sus aventuras.

Sin embargo, el fin de Super López no implica necesariamente que Juan López Fernández, el alias de Jan, cuelgue los lápices. Al contrario: Ahí está «Don Talarico» o «Super Rayón« como ejemplos de una creatividad que no cesa. Incluso recientemente recoloreó “Cab Halloloco” e incluyó una nueva historia para que este personaje por fin tuviera la edición que merecía, que llevó a cabo la editorial DQ de forma magistral, como ha hecho también con la nueva creación de Jan: Rich Tex Format, que ya cuenta con dos referencias en el mercado. Hoy nos centraremos en “Deikoon”.

“Deikoon” nos remite a uno de los satélites troyanos de Júpiter. También es el nombre del primer álbum de Rich Tex Format y la puerta a un nuevo universo que nos espera en sus páginas. Un universo futurista pero con una evidente referencia al mundo que nos rodea, este mundo que pisamos y que cada día nos desayunamos con noticias de tragedias ocurridas en patera mientras que en las páginas del corazón comentan como algún magnate tiene islas en su propiedad. Cogiendo ambos conceptos, y teniendo en cuenta que el criterio de reparto de recursos cada vez es más asimétrico en nuestro planeta tierra, Jan ha ideado su particular “space opera”, en la que la ciencia ficción marida con lo social.

Situémonos en lo que nos espera en este cómic: En un futuro lejano, la brecha entre ricos y pobres ya es máxima. Hasta tal punto que los más pudientes han emigrado del esquilmado planeta tierra, donde siguen habitando las clases menos favorecidas. Los ricos entonces viven en asteroides, como el personaje que protagoniza el cómic. Un personaje propio de su clase social, en ocasiones más liberal que “sus colegas”, con aires de “bon vivant” y coleccionista de amantes.

Rich Tex será testigo de una invasión alienígena a la que combatirá. A su lado, un rico elenco de secundarios dará el paisaje coral necesario para que la aventura no decaiga ni por un momento. Como su mayordomo androide: Páscuale, todo un descubrimiento. De fondo: una lectura sobre la desigualdad y una visión de lo que puede devenir esta sociedad en la que al humilde se le alinea cada vez más intensamente, pantallas mediante. En primera línea, la aventura que protagoniza Rich Tex, con suficientes elementos para no bajar el pulso de diversión entre sus páginas. Juntando ambos parámetros están las 64 páginas de este “Deikoon”, una sabia mezcla de entretenimiento de buena factura con dosis de cuestiones sociales para reflexionar. Y es que Jan ha hecho un gran de tebeo de ciencia ficción, que como bien saben muchos, es el género donde mejor se pueden plasmar las metáforas de la sociedad real. Con esta obra, editada por Editorial DQ en su sello DQómics, no solo se constata de que hay vida después de Super López, sino que esta además es creativamente muy saludable. Ganas tenemos de saber que nos deparan las siguientes entregas de la trilogía de “Las Futurísticas aventuras de Rich Tex Format.