“Vinyl Destination no es sólo una tienda de Discos… ¡También es un club de lucha supersecreto!”

Chris lo tiene claro. Estamos en 1999 y ella se está dedicando a vivir su sueño hecho realidad: Trabajar en una tienda de discos. Posiblemente uno de los trabajos más cool de finales del siglo XX y comienzos del XXI. De cuando la música aun necesitaba exclusivamente de soportes físicos para ser compartida, y espacios físicos donde rebuscar entre cubetas, aquel vinilo que querías hacerte con él, que te transportaba mientras descubrías nuevas canciones entre sus surcos…

“Spin the black circle” cantaban Pearl Jam a mediados de los años´90. Posiblemente en Vinyl Destination usarían esa canción como soundtrack, mientras las chicas atendieran al público. Luego, tras la hora de cierre, era el momento de investigar que posibles peligros estarían acechando en la escena de L.A….

Mientras el ritual se lleva a cabo y la aguja comienza a pasar por el vinilo negro que gira, abrimos el tebeo que nos ocupa hoy: “Heavy Vinyl: ¡Efecto 2k-O!” de Carly Usdin, Nina Vakueva, Irene Flores, Lea Caballero y Natalia Nesterenko. Un tebeo que sigue la estela de su precedente, el fresco “Heavy Vinyl” donde Chris, la protagonista y narradora del cómic, comienza a hacer sus sueños realidad.

Con 45 revoluciones por minuto, como los buenos singles, nos espera este TPB, en el que la acción nos sitúa días antes del temido efecto dos mil. Aquel temor que se extendió como la pólvora que predecía que con el cambio de siglo y del dígito de los miles la tecnología y los ordenadores colapsarían. Un temor que fue general y extendido en aquel mundo donde internet se iba extendiendo poco a poco, a una velocidad lenta, casi ridícula, como la que tenían las transferencias de datos de la época.

Ese es el mundo al que nos lleva, de forma fresca y amena Carly Usdin («The Avant-guards«) en este relato. Incluso se podría decir que de manera hasta didáctica, por lo bien que quedan ilustradas algunas costumbres culturales de la época. Sirviendo todo ello como telón de la aventura que les espera a las dependientas de Vinil Destination. Una aventura en la que la radio está muy presente, como lo estaba en aquella época predigital.

“Te imaginas poder tener millones de canciones solo con unos clics? Podría cambiarlo todo.”

De hecho, lo cambió. Como ocurre cuando irrumpe cualquier revolución tecnológica. Si bien, en este cómic, el lápiz de Nina Vakueva, las tintas de Irene Flores y Lea Caballero y el color de Natalia Nesterenko se encargan de retratar de forma verosímil aquellos días previos al cambio de siglo. Días en los que Chris, Maggie, Kennedy, Dolores e Irene viven con la misma naturalidad que impregna el guion de Usdin este cómic. Y con la autenticidad que respiran estas páginas por el acabado que tienen: fresco y orgánico en cuanto a composiciones de página que funcionan, desplegando una narrativa ágil ideal para el tono del relato.

Publicado originariamente por Boom! Studios, Fandogamia se ha encargado de materializar este tebeo en castellano en una edición formato TPB en rústica, en la que nos esperan como extras algunas muestras del proceso de elaboración del cómic, desde el guion al resultado final. 112 páginas que, como un buen LP o un buen CD, se “escuchan” de principio a fin mientras llenan con su sonido toda la habitación donde el tebeo se lee. Un tebeo, en definitiva, cuya lectura “suena«. Con tono amable, pero manteniendo retazos de “Slice of life” atemporal y aquel glamour que tuvo cualquier rama de la industria rock y pop de cambio de siglo. Como un buen “circulo negro” que no para de girar mientras la aguja lo recorre. Mientras tanto nos sumergimos en las viñetas de este tebeo amable, de cuando despiertan los sueños mientras sube el volumen…