“Ángel Oscuro, Death’s Head, Motormouth, Killpower, Liger, Albión y Ultramarine… El Misterioso guardián del tiempo los arrancó de sus tiempos y lugares, y los reclutó para formar la Guardia Oscura, un equipo con el que frustrar los planes de Mis-Tec”

El comienzo de los noventa supuso la expansión de cabeceras de Marvel UK, la división inglesa de la casa de las ideas. Con Paul Neary como editor y Dan Abnett como principal guionista llegaron nuevos personajes e ideas a los quioscos de Inglaterra, Escocia, Irlanda y Gales. Unos tebeos donde la ciencia ficción tenía más peso que lo superheroico y donde se apreciaba la alargada sombra de Image en sentido estético y narrativo. Esa revolución de títulos supuso que la Casa de las Ideas Británica mirara a nuestro país como vivero de nuevos talentos y provocara el primer movimiento internacional que dio la primera escuadra de dibujantes españoles en mucho tiempo. Marvel Uk se puso en contacto con Carlos Pacheco, Salvador Larroca y Pasqual Ferry para ofrecerles dibujar algunas de estas cabeceras.

Carlos Pacheco por aquel entonces ya se había hecho un nombre para los aficionados a Marvel y DC comics en España, sobre todo en el caso de Fórum, donde asombró a propios y extraños con impactantes ilustraciones que sirvieron como portadas y posters. Incluso había dibujado una pequeña historia (“American Soldier”), que en algún momento reseñaremos en esta web. Lejos quedaba ya sus colaboraciones en fanzines como “Turboescape”o sus primeras historias en “Comix internacional”, “Cimoc” y “Humor a tope”. Comenzaba el salto internacional. Primera parada: Londres.

Nada más llegar, y tras realizar portadas para “The Exploits of Spider-Man”, se estrenó con una historia corta para “Motormouth and Killpower”. Era el momento de asumir el primer encargo en su totalidad, y no fue otro que el que se suponía que era la serie estrella de Marvel UK: “Dark Guard”, el supergrupo donde participaban los personajes más significativos de la división británica de la casa de las ideas.

Con guiones de Dan Abnett y tintas de un joven Óscar Jiménez (este es su primer trabajo profesional) comenzó una serie que bebía de los tradicionales crossovers del otro lado del Atlántico. Donde pesaba más la espectacularidad propia de aquellos años que el desarrollo de personajes: Acción a raudales, diálogos propios de buddy movies en un planteamiento que miraba demasiado a Image. En lo argumental, “Dark Guard” no fue más que otra réplica del efecto Image, plagado de excesos y lugares comunes propios de los comics-books de esa época.

Con fecha de portada octubre de 1993 apareció la primera entrega de una serie que apenas contó con tres números más, debido a la cancelación y posterior desaparición de Marvel UK. Cuando se anunció el fin Pacheco, Jiménez y Abnett tenían preparados los dos siguientes números, que tras un primer cambio se iban a fusionar en un especial llamado “Dark Guard Gold”, pero que al final se quedaron en el cajón, dejando la serie cortada en apenas cuatro números de mucha acción y lugar común. Unos números que Cómics Forum recopiló en un tomo que inauguró “Los Libros del Salón” (al calor del Saló del Cómic de Barcelona) e incluyendo pequeño artículo donde Pacheco explicaba el argumento de esas dos ultimas grapas que nunca verían la luz. El texto se acompañaba de páginas de esos números, algunas a lápiz y otras ya entintadas por Jiménez y rotuladas. El volumen además incluía entrevistas a los autores españoles. Sin duda la edición de Antoni Guiral y Antonio Martín fue meritoria

Los extras ponían en valor el trabajo gráfico de Pacheco, con unas páginas a lápiz con mucho detalle, donde se podía apreciar la fuerza de su dibujo. Quizá con más fuerza incluso que el resultado final que se publicó en Dark Guard. Eso es lo esencial que guarda este tebeo: más allá de una serie para el olvido quedan en este tomo muestras de la calidad gráfica que tenía Pacheco entonces, justo antes de cruzar el Atlántico. La historia de Dark Guard en si es una más de su época y lugar, con los defectos y excesos de esos noventa donde Image reinaba buscando la espectacularidad. Para los fans de Carlos Pacheco este trabajo si puede ser de interés en el sentido de poder ver su trabajo justo antes de entrar en el mercado americano.