Europa en los días finales de la Segunda Guerra Mundial. Ante la falta de efectivos, Adolf Hitler toma una decisión drástica para engrosar sus filas con más soldados: reanimar cadáveres de los caídos en combate con un suero ideado por su médico y dealer particular: el Doctor Theodor “Morell. Ante esta sobrenatural amenaza, el Sargento Rock y la compañía Easy reciben la misión de adentrarse en líneas enemigas para acabar con el siniestro ejercito de zombis nazis. Así se nos presenta “El sgto. Rock contra el ejército de los muertos” (“DC Horror Presents: Sgt. Rock vs. The Army of the Dead”), de Bruce Campbell, Eduardo Risso y Kristian Rossi, editado recientemente por ECC ediciones.

De muertos vivientes algo entiende Bruce Campbell, el icónico «Ashley J. Ash Williams» de la exitosa trilogía “Evil Dead”, dirigida por Sam Raimi. Campbell, que también encarnó al icónico Elvis en la deliciosa joya de culto “Bubba Ho-Tep” de Don Coscarelli, es posiblemente el actor más célebre de lo que se entiende por cine de serie B. Ocasionalmente se ha puesto detrás de la cámara, además de escribir obras que alcanzaron su repercusión en el mundillo de la Sci-Fi como “ If Chins Could Kill: Confessions of a B Movie Actor” y “Make Love! The Bruce Campbell Way”. En el cómic también ha hecho sus incursiones como guionistas: escribiendo una entrega de “The Hire” o siendo el responsable de la adaptación de «Man With The Screaming Brain» al noveno arte.

“¿Cómo matas algo que está muerto?
La respuesta es una buena tocada de huevos”

Así se expresa Bruce Campbell en el booktrailer promocional de la obra. En “El sgto. Rock contra el ejército de los muertos” es obvio que, por temática, el icónico actor se siente como pez en el agua. Y lo demuestra: una trama sin pretensiones, a todas luces efectiva, con algún punto de humor que inevitablemente nos lleva a pensar en las películas que encarnó a Ash Williams. Por estas viñetas sobrevuela un sentido muy marcado del mejor entretenimiento terrorífico. Ese que más allá del susto o miedo, nos lleva al delirio y proporciona diversión a raudales. Todo ello está en este guion que funciona a la perfección en su objetivo. Divertir desde lo extremo y lo frenético. Un guion en el que la compañía Easy y el Sargento Rock se mueven con absoluta naturalidad orgánica frente a estos zombis nazis que son puro delirio. Rock y sus chicos son personajes de la vieja escuela y Campbell, tipos de una pieza que no dudan en enfrentarse a lo que sea. Aunque sean zombis nazis. Con ese tono de diálogos de tipos que las han pasado de todos los colores y esa aparente irreverencia ante lo terrorífico. Todo eso Bruce Campbell lo potencia en los diálogos de la obra, consiguiendo el estilo preciso para que funcione la trama.

En lo gráfico, Eduardo Risso se antoja la mejor elección para un guion de estas características. Además de composiciones efectivas que guían de forma orgánica el ojo del lector, los rostros de cada uno de los personajes “cuentan” su estado de ánimo en todo momento, aportando mayor consistencia a este fabuloso delirante golosina. En las viñetas vertidas. tanto lo bélico, lo terrorífico y lo grotesco funciona a la perfección en una combinación de claroscuros, encuadres certeros y mucho, mucho, “enertaiment”. Cosa que Kristian Rossi maximiza con la elección cromática que aplica en su coloreado, dando el tono que precisa un tebeo de estas características.

Publicado en Estados Unidos originariamente en una serie limitada de seis grapas por DC comics, ECC ha optado por traer la obra directamente ya compilada en un volumen de 160 páginas en formato cartoné. Una opción acertada, pues creemos que este bizarría hecha tebeo se disfruta más y mejor de forma unitaria. Junto a las seis entregas, además, se reproducen todas las portadas con las que la obra se editó en grapa: tanto las “main covers” a cargo de Gary Frank y Brad Anderson, como las variantes a cargo de Charlie Adlar, Chris Mooneyham, Pia Guerra, Ben Oliver, Francesco Francavilla, Christopher Mitten, Evan “Doc” Shane, Ben Templesmith, Elisabeth Torque, Kyle Hotz y Dan Brown. Todas en formato “textless”, para disfrutar mejor de la ilustración. Incluida la que luce como portada en este “El sgto. Rock contra el ejército de los muertos”, la contundente variant de Frank Quitely que conquista por derecho propio lucirse en el volumen, pues capta la esencia de lo que nos espera en estas páginas: delirante diversión terrorífica.