“”Ahora yo soy tu casa” había dicho Kaya,

“Y tú la mía””

Kaya y Jin han conseguido dejar atrás Kahaka. Sin embargo, lo que les espera no será un camino fácil. Para poder avanzar en su huida se verán envueltos en la búsqueda de una princesa rebelde, lo que les llevará a una ciudad donde la revolución está a punto de producirse, donde los lazos más profundos serán puestos a prueba.

Continúa la fresca saga creada por Wes Craig en su tercer TPB: «Kaya y el templo de Shazir» («Kaya Book 3: And the Temple of Shazir«), recién editado por Norma Editorial. Un volumen que recoge las entregas #12 a #18 de la serie de Image y que supone un paso más para afianzar la propuesta de Craig. Toca sumarle profundidad a la frescura y sorpresa que supuso el debut de la serie, y Craig tiene recursos para ello. Hechas ya las presentaciones en entregas anteriores, es momento de dotar de una mayor profundidad a la trama. Craig lo hace con una nueva aventura que va a servir para ahondar en la relación de Kaya y Jin en ese entorno hostil donde, por mucho que encuentren aliados coyunturales, solo se tienen el uno al otro.

Así comienza este “Libro 3”, en una trama que va ganando intensidad conforme se desarrolla. Con elementos clásicos de fantasía y aventura, bien cohesionados, el eterno camino del héroe y la senda del descubrimiento son plasmados de forma eficaz. Hecho que se potencia a través del “savoir faire” que imprime Craig a cada página, dando un paso adelante en su estilo gráfico como narrador. Encuadres y composiciones al servicio de lo contado que potencian la aventura presentada, haciéndola crecer.

En el mismo sentido cabe destacar a Jason Wordie y los colores que utiliza, revelándose como el socio cromático ideal para un tebeo de estas características. Con su color singulariza a la serie, consiguiendo junto a Craig que “Kaya” sea una serie con una personalidad propia y un atractivo gráfico que puede seducir a lectores de cualquier edad.

Lejos de agotar la fórmula, “Kaya y el templo de Shazir” consolida la serie y aumenta su potencial materializándose en un arco argumental solvente. Con una fuerza gráfica notable, las 176 páginas que la componen dejan un buen sabor de boca tras su lectura. Recién editado por Norma editorial en formato rústica, con traducción de Uriel López, este tercer volumen afianza tanto al título como a Craig en una cabecera. Puede que esta serie no haga “mucho ruido” entre tantas novedades, pero proporciona buenas “nueces” de entretenimiento de aventura y fantasía. De las que conviene degustar.