Hay un momento en el que el manantial creativo se seca. Aquel filón de ideas, donde manaba un caudal inagotable, ha comenzado a escasear. Y la página en blanco se mantiene ahí, presente en la mesa de dibujo. Hay que continuar, seguir produciendo. La angustia ante la falta de ideas comienza a gestarse. Es el momento de la crisis creativa. Es momento de “Terapia de Grupo” (“Thérapie de Groupe”), de Manu Larcenet, que Norma ha estrenado en castellano.

De esta premisa parte la nueva incursión de Larcenet (“Los combates cotidianos”, “Blast” o, entre otros, “La légende de Robin des Bois”) en el humor, con la eterna búsqueda de ideas del creador como referente. Esto le sirve para construir una sátira que tiene tanto de psicoanálisis como de mordaz reflejo del entorno donde vive el autor.

 

La carencia de la chispa creativa lleva al protagonista (y autor) a la depresión, asomando los fantasmas que le asolan. Así Larcenet comienza, en los gags de la obra, a exorcizarlos, con ácido humor, exponiéndolos a la liberación que supone verterlos en las viñetas. Todo en un hábil plano cómico, con la sátira como condimento principal. Donde no esconde (ni pretende) plasmar la ansia y miedo a quedarse sin ideas o su bipolaridad diagnosticada. Motivo por el cual se normaliza en estas páginas al mostrarse.

Dibujo, creación, ideas. También los motores de inspiración desde el origen de los tiempos junto a la industria (o la percepción que el autor tiene de ella). Entre todo ello, la angustia ante el folio en blanco…. Todo está en estas viñetas, que son pura sátira, pero también catárticas. Pues en este proceso el autor exhibe, entre líneas, su inconsciente creativo y psicológico. Todo lo que anida en el interior, lo que sirve para que las ideas germinen. Lo más elemental del proceso que es la motivación que genera la chispa. Todo está ahí para, en esta ocasión, servirse en una buena comedia. Una comedia inteligente, certera, introspectiva en ocasiones y siempre impúdica por lo que muestra. Una mirada lúcida al fracaso, la enfermedad mental, la familia, el artista y la creación. Entre el inconsciente y lo surrealista, Larcenet acierta en los gags que nos presenta en su exorcismo. A eso, súmense varias páginas que sorprenderán gratamente cuando se llegue a ellas.

Dividido en tres actos: “La estrella danzarina” (“Thérapie de groupe – Tome 1. L’Étoile qui danse”), “Quien bien concibe” (“Thérapie de groupe – Tome 2. Ce qui se conçoit bien”) y “La tristeza durará para siempre” (“Thérapie de groupe – Tome 3. La tristesse durera toujours”), esta obra apareció en el mercado franco belga entre 2020 y 2022. Para la edición en castellano, Norma ha optado con buen criterio por presentarla directamente en formato integral, compilando los tres álbumes editados en francés por Dargaud en un cuidado volumen de 180 páginas en cartoné, con traducción de Eva Reyes de Uña. Un volumen que nos enfrenta a los demonios de la creación y a otros muchos, que nos confronta con la industria actual y nos permite observar un dialogo creativo, tanto explícito como implícito, con muchos referentes del arte universal. Con la angustia y las afecciones mentales como elementos presentes. Bien ensamblado con ácido humor, a esta “Terapia de Grupo” merece la pena asistir.